El estrés, además de afectar a la salud física, disminuye y deteriora las capacidades intelectuales. Si el
alumno está sometido a estrés no puede aprender de forma eficaz. Para asimilar nuevos aprendizajes, el alumno tiene que estar en una situación relajada y en un ambiente
adecuado.
En esta acción formativa, los profesores aprenderán, de cara a poder enseñarlo a sus alumnos,
a:
- Tomar conciencia de cómo afecta el estrés en lo corporal y en lo psíquico.
- Identificar el grado de estrés que uno tiene en cada momento.
- Identificar cómo están los alumnos de forma habitual.
- Técnicas de relajación.
- Herramientas y trucos que ayudan a tener un cuerpo y una mente relajados.
- Cómo gestionar sus momentos de estrés.
- Cómo generar situaciones favorables para el aprendizaje de sus alumnos
- Qué hacer ante un cuadro de ansiedad